miércoles, 7 de mayo de 2025

EL PORIS - ARICO NUEVO (Por el Barranco de Tajo)

EL PORIS - ARICO NUEVO 
(Por el Barranco de Tajo)

FICHA TÉCNICA
 
TÉRMINO MUNICIPAL: Arico.
COMO LLEGAR: Al punto de partida de la ruta se llega a través de la Salida 39 de la autopista del sur, la TF-1, tomando la carretera que se dirige al Faro del Poris.
COMIENZO: El Poris de Abona.
FINAL: Caserío de Arico el Nuevo.
DIFICULTAD: Media.
DURACIÓN: Indeterminada.
LONGITUD: 8,3 km.
PROVISIÓN DE AGUA: En el núcleo urbano principal del Poris de Abona hay toda clase de servicios.
LUGARES DE INTERÉS: 1.- Ermita de Nuestra Señora de La Merced; 2.- Playa Grande; 3.- La Sarnosa; 4.- Zona de escalada 1; 5.- Zona de escalada El Poris; 6.- Acueducto de piedra chasnera; 7.- Galería y Lavaderos de Tajo; 8.- Parroquia de Nuestra Señora de La Luz; 9.- Casco histórico de Arico Nuevo (BIC).
VENTAJAS: Recorrido inusual íntegramente por el cauce del barranco, enclave natural de notable biodiversidad, con elementos etnográficos dignos de ser visitados.
INCONVENIENTES: En algunos tramos del barranco hay algunas trepadas donde se requiere extremar las precauciones, tirando de la intuición de cada persona. Hay un pequeño tramo en la Hoya de la Fajana, después de abandonar el sendero señalizado, que el recorrido discurre por zona muy expuesta al barranco.
PELIGROSIDAD: Ninguna digna de mención.
TIPO DE RUTA: Senderismo.
 

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CARTOGRAFÍA


DESCRIPCIÓN

Damos inicio esta ruta en la Punta de Abona, donde hay un pequeño núcleo poblacional alrededor de la Ermita de Nuestra Señora de La Merced, datada desde principios del siglo XVI, cuando apareció en las costas cercanas una imagen de la Virgen de Tajo, actualmente emplazada en la Ermita de Arico el Nuevo. En los siglos XVII y XVIII la Ermita pasa por diversas modificaciones, una de ellas hecha después de un incendio acaecido en el año 1835 que la destruyó por completo y otra, debido a un asalto de piratas argelinos que la dejó en un estado de ruina casi total. En el año 1952 se amplía su estructura para dotarla de tres naves y un coro, que es como se conserva en la actualidad; en el exterior destaca su portón de madera entre un arco de cantería de medio punto y todo el templo rematado en una espadaña del mismo material donde cuelga la campana.

Ermita de Nuestra Señora de La Merced.

Playa Grande (izq.).

La Sarnosa (dcha.).

Desde la plaza donde está la Ermita, accedemos mediante una pasarela peatonal a la Playa Grande, una cala muy pintoresca medianamente amplia y con arena de color amarillo, con unas vistas panorámicas e inmejorables hacia el pueblo de El Poris. Salimos de la playa cruzando una zona de rocas y luego el Barranquillo Basilio, accediendo a un sendero marcado que discurre bordeando la costa y paralelo a la carretera, que nos queda a nuestra izquierda; luego seguimos llaneando por la zona de La Cantera, el cauce del Barranco de Callao Grande, donde hay una playa de callaos (cantos rodados) y también por Las Toscas, donde unas grandes rocas de tosca desprendidas se adentran mar adentro formando una pequeña cala bastante pintoresca, hasta llegar a La Sarnosa un pequeño núcleo poblacional asentado en las inmediaciones de la Punta de la Sarnosa, un entrante rocoso que sirve de abrigo a La Mulita, una playa de rocas que se extiende hasta la zona conocida como Callao del Cuervo.


Vistas de El Poris desde La Sarnosa.

En este punto, donde hay varado un barco de madera a modo de decoración, giramos a la izquierda, caminando entre las viviendas, hasta dar con la carretera de acceso a la Punta de Abona; cruzamos la vía y tomamos una pista de tierra que asciende suavemente bordeando el cauce del Barranco de Las Caballos y en unos doscientos cincuenta metros estaremos a la altura de la autopista TF-1, la cual cruzaremos por un paso subterráneo y después nos desviamos a la derecha para continuar ascendiendo por la misma pista de tierra, que discurre ahora bordeando las paredes de piedra seca de unas viejas huertas de cultivo situadas en los Llanos del Poris; a nuestra derecha y a un nivel superior, queda la carretera TF-627 que se dirige hacia el Lomo de Arico bordeando las faldas de Montaña del Puerto (131 m.), que la cruzaremos después por un paso inferior, bajo el llamado Puente de Los Caballos, para conectar luego con el cauce del Barranco de Tajo, denominado en este tramo como Barranco Ballardo.

Sendero bordeando el Bco. de Los Caballos.
Montaña del Puerto (131 m.).


Ya dentro del cauce seguimos avanzando, sorteando algunas rocas y rodeados de vegetación característica de los barrancos y barranquillos de la vertiente sur de la isla, como son Balos (Plocama pendula), Cardones (Euphorbia canariensis), Tabaibas Amargas (Euphorbia lamarckii) y Vinagreras (Rumex lunaria), además de una ingente cantidad de Rabo Gato (Pennisetum setaceum), una planta invasora muy difícil de erradicar que poco a poco va desplazando a la vegetación autóctona. 

Puente de Los Caballos.


Zona de escalada 1.

Enseguida, después de haber ignorado un cauce secundario por nuestra derecha, pasamos junto a las ruinas destartaladas de lo que fue un puente que sostenía una vieja atarjea y unos pocos metros después llegamos a un salto en el cauce donde hay una zona de escalada; lo evitamos, ya que es imposible trepar por él y lo rodeamos por la derecha sin dificultad, para acceder de nuevo al cauce natural del barranco una vez lo hayamos superado.


Continuamos la marcha por el cauce del barranco, remontando algunas rampas rocosas y sorteando sin dificultad rocas de basalto dispersas por el entorno; en las paredes colindantes, que no son muy altas, crecen poblaciones de Cardonal – Tabaibal (Euphorbia canariensis y Euphorbia lamarckii) muy bien conservadas y adaptadas al entorno natural, en cambio en el cauce, el Rabo Gato (Pennisetum setaceum) se hace muy presente, dificultando el crecimiento de algunas especies autóctonas como Cornicales (Periploca laevigata) y Balos (Plocama pendula), entre otras.


Zona de escalada El Poris.

Unos metros más adelante, el barranco gira moderadamente a la izquierda, después de la desembocadura por nuestra derecha del Barranco de La Guirrera; nos encontramos una gran pared de roca a nuestra derecha con formaciones dispuestas de forma columnar, que es la zona de escalada llamada El Poris, que se eleva sobre un suelo ancho y llano formado por una plataforma rocosa también “invadida” por el temido e incómodo Rabo Gato (Pennisetum setaceum). 


Después, el cauce se estrecha repentinamente y da varios giros seguidos en la zona conocida como Las Guirreras, topónimo proveniente de unas informaciones veraces de que en estos riscos había varios lugares donde anidaban los Guirres (Neophron percnopterus), una especie de rapaz extinta en la isla cuyos últimos ejemplares habitaron por estos lugares, siendo muy frecuentes verlos en la zona costera de El Poris, allá por los años 40 del siglo pasado; actualmente los únicos reductos donde habitan estas aves endémicas están en las islas de Fuerteventura y Lanzarote.

Remonte en el cauce, sin dificultad.


Seguimos la ruta por el cauce, bajo la Hoya Ballardo, remontando sin dificultad mediante un firme rocoso y prácticamente llano; después encontramos una pared rocosa de poca altura que podemos salvar sin problema, la cresta nos ofrece una imagen panorámica de parte del fondo del barranco que hemos recorrido, donde se distinguen las vertientes pobladas del Cardonal – Tabaibal (Euphorbia canariensis y Euphorbia lamarckii) característico, donde crecen también Verodes (Kleinia neriifolia) y otras especies nativas. 

Travesía entre caos de grandes rocas.

Luego seguimos remontando y abriéndonos paso a través de un caos de grandes rocas basálticas que forman un auténtico laberinto entre ellas, teniendo que pasar en ocasiones por debajo de algunas; hay muchas rocas que tienen marcas de magnesio que evidencian que este es un lugar para la escalada y estas piedras en este entorno es el sitio ideal para practicar el “Boulder”.  Unos metros más adelante, cuando parece que no podemos seguir, nos encontramos repentinamente con un salto que parece impracticable, pero con algo de intuición y cuidado, lo podemos pasar.

El paso más delicado de la ruta (dcha.).

Después de este paso algo delicado, continuamos la marcha por un paso rocoso estrecho y angosto y después cruzamos una pista de tierra que, por la izquierda, conecta con el sendero que se dirige al Poris de Abona y por la derecha asciende, después de haber pasado junto a unas viejas huertas, en dirección a Arico Nuevo. 


Acueducto de piedra chasnera.

Avanzamos luego por un cauce más abierto delimitado por laderas suaves que se extienden bajo el Lomo de Las Casas y el Lomo del Molino, cubiertas de un frondoso Cardonal – Tabaibal (Euphorbia canariensis y Euphorbia lamarckii), donde posiblemente haya algún ejemplar aislado de Sabina Canaria (Juniperus canariensis); desde aquí tenemos a la vista una construcción muy curiosa que se encuentra en una de las vertientes, un acueducto hecho de piedra chasnera que servía para trasvasar el agua de la Galería de Tajo, situada más arriba. Siguiendo por el cauce también vemos los restos de algunas canalizaciones más rústicas que se pierden entre la vegetación y que dan un sentido etnográfico a este tramo del barranco.

Viejos canales en el cauce del barranco.



De camino, bordeamos una pared de tosca blanca y luego pasamos bajo un promontorio rocoso que se alza en la vertiente derecha del barranco; después de este punto, buscaremos una vereda algo desdibujada y erosionada que por la izquierda remonta entre un viejo Sauce Canario (Salix canariensis), único ejemplar que subsiste de la sauceda que crecía antiguamente en el fondo del barranco, hasta llegar a una explanada donde se encuentra la Galería de Tajo y unos viejos lavaderos. Antes de la conquista de la isla, como se desprende de las informaciones que hay en las Datas de Tenerife, existía en este lugar un manantial natural que, según algunas investigaciones fidedignas, brotaban aguas medicinales catalogadas como las mejores de la isla; posteriormente se abrió la galería y se construyeron los lavaderos, hechos de piedra chasnera y restaurados posteriormente en el año 1997.

Lavaderos de Tajo.

Manantial y Galería de Tajo (izq.).

Un camino empedrado asciende entre Verodes (Kleinia neriifolia), Balos (Plocama pendula), Tabaibas Amargas (Euphorbia lamarckii) Cardones (Euphorbia canariensis) y Cornicales (Periploca laevigata), hasta coronar una loma donde hay un poste con varias señales de dirección; a la izquierda se evidencia el camino que va hacia El Poris, bordeando una vieja atarjea de tosca blanca y de frente el que se dirige hacia Arico Nuevo. 

Camino empedrado de acceso a los Lavaderos de Tajo.

Señalización (dcha.).

Continuamos por este último bordeando el cauce del barranco, desde donde podemos observar los restos de las pilastras de piedra que soportaban un canal de agua, abandonándolo un poco más adelante junto a los muretes de piedra seca de unas viejas huertas abandonadas, es en este punto donde hay un poste con señalización del sendero hacia Arico Nuevo, donde nos tenemos que desviar hacia la izquierda abandonando el camino, para continuar por una vereda algo desdibujada que discurre por la Hoya de la Fajana, entre multitud de Tabaibas Amargas (Euphorbia lamarckii), bordeando los muros de piedra de las huertas. 


Instalaciones hidráulicas abandonadas.


El recorrido avanza por un costado del barranco, denominado en este tramo Barranco de Boso, teniendo a la vista su considerable profundidad y angostura; después, por las inmediaciones de la Hoya de La Brisa, volvemos a tomar el camino por el cauce, que nos aparece menos profundo y perfectamente accesible. 

Tramo bordeando el Barranco de Boso.


Ascendemos por el fondo del barranco remontando algunos escalones rocosos sin dificultad y varios toboganes y recovecos de rocas que forman alguna poza de agua ocasional, donde crecen Balos (Plocama pendula) y peligrosas poblaciones de Rabo Gato (Pennisetum setaceum), que poco a poco van desplazando la vegetación autóctona. Las paredes del barranco se alzan con alturas diversas, formando un cauce más o menos angosto, hasta que en un momento determinado se separan considerablemente para formar una rambla más transitable y ancha.



Continuamos mediante un firme bastante pedregoso, abriéndonos paso entre grandes rocas desperdigadas por el entorno que son utilizadas para la práctica del “Boulder”, modalidad de la escalada que se practica sin elementos de seguridad personales como arneses y demás material, que consta de escalar estas rocas que, mayoritariamente tienen poca altura. 

Zona de  escalada "Boulder".

Por el entorno y en las laderas colindantes, crecen gran cantidad de Cardones (Euphorbia canariensis), Balos (Plocama pendula), Tabaibas (Euphorbia lamarckii) y Matorriscos (Lavandula canariensis); este tramo, ya con vistas a las primeras casas de Arico Nuevo, suele estar bastante frecuentado por escaladores de dicha modalidad. 


Sendero de salida del cauce, hacia Arico Viejo.


Luego, por la zona de Los Portillos donde hay numerosas huertas de cultivo abandonadas en las vertientes colindantes, nos tendremos que fijar a la derecha como se inicia una vereda bastante estrecha que remonta suavemente junto a una casa-cueva excavada en un talud de tosca y gira luego en varios sentidos, ascendiendo por un piso empedrado que discurre entre algunas huertas de cultivo y varias viviendas, desembocando poco después en la Calle Veinticinco de Julio, justo donde hay una vieja fuente pública en desuso. 

Camino empedrado.

Vieja fuente de agua de abasto público (dcha.).

Tenemos que seguir hacia la izquierda remontando dicha calle hasta llegar a la Plaza Benítez de Lugo, donde se encuentra la Parroquia de Nuestra Señora de La Luz, edificio religioso erigido Parroquia en el año 1929, comenzando las obras de su construcción en 1768 edificando un pequeño templo de forma rectangular con una espadaña de cantería al lado izquierdo, reformado en varias ocasiones en 1845 y posteriormente en 1940, hasta su actual configuración. 

Casco urbano de Arico Nuevo (BIC).

Parroquia de Nuestra Señora de La Luz.

En el interior destaca la imagen religiosa de Nuestra Señora de la Luz o comúnmente denominada Virgen de Tajo, fechada en el siglo XVI, siendo una de las más antiguas del sur de la isla; todo el entramado de calles y el caserío que rodea la plaza están catalogados como Bien de Interés Cultural (BIC), con categoría de conjunto histórico.

Vista general de Arico Nuevo (BIC).

Damos por finalizado el recorrido en este punto, sabiendo que es paso obligatorio de una de las etapas del Camino Real del Sur, concretamente la segunda, que une el municipio de Fasnia con el de Arico.

© Texto y fotografías de Francisco Fariña

2 comentarios:

  1. Francis, creo que te equivocaste con los Aricos, las fotos son del núcleo de Arico Nuevo y la foto general final es del núcleo de Arico Viejo.

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    1. Hola, efectivamente las fotos del núcleo urbano son de Arico Nuevo, fue error de transcripción, que ya he corregido. La foto panorámica si es de Arico Nuevo, sacada desde el otro lado del barranco; en el lado superior izquierdo de la foto puedes ver los árboles de la plaza y donde está la palmera sube el camino que asciende desde el barranco hacia el pueblo. Gracias por la corrección, un saludo.

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