martes, 4 de octubre de 2011

PR-TF-10 - CHINAMADA - PUNTA DEL HIDALGO


CHINAMADA - PUNTA DEL HIDALGO
(PR-TF-10)


Roque de Taborno
FICHA TÉCNICA

TÉRMINO MUNICIPAL: La Laguna.
COMO LLEGAR: La TF-12, carretera de Las Mercedes, se cruza entre los puntos kilométricos 20 y 21 con la TF-145, que termina en el Caserío de las Carboneras; una vez allí hay una vía asfaltada que nos lleva hasta el Caserío de Chinamada.
COMIENZO: Caserío de Chinamada.
FINAL: Punta del Hidalgo.
DIFICULTAD: Baja.
DURACIÓN: 3 horas.
LONGITUD: 4,7 Km.
PROVISIÓN DE AGUA: En el caserío de Chinamada hay un restaurante y en Punta del Hidalgo hay multitud de establecimientos.
LUGARES DE INTERÉS: Caserío de Chinamada; Mirador de Agüaide; Roque de los Pinos; Barranco del Tomadero; Cueva de Treguero; Degollada de los Almácigos; Roque de dos Hermanos; Playa de los Troches.
VENTAJAS: Recorrido en suave descenso con amplias y panorámicas vistas hacia el Roque de dos Hermanos y Punta del Hidalgo.
INCONVENIENTES: No es un recorrido circular.
PELIGROSIDAD: Nula.
TIPO DE RUTA: Senderismo.

PUEDES SEGUIR ESTA RUTA EN WIKILOC


CARTOGRAFÍA


DESCRIPCIÓN

La ruta CRUZ DEL CARMEN – CHINAMADA – LAS CARBONERAS está descrita desde el punto inicial del sendero PR-TF-10, aunque en aquella ocasión la confeccioné circular, pasando por el caserío de Las Carboneras por la variante PR-TF-10.1 para terminar de nuevo en la Cruz del Carmen pasando por la Degollada de las Escaleras; dicha variante comienza en el caserío de Chinamada, donde daremos inicio al recorrido hacia Punta del Hidalgo, completando así la totalidad del recorrido original señalizado como PR-TF-10.

Caserío de Chinamada y Roque de los Pinos.

Chinamada es un pequeño núcleo poblacional de origen Guanche que se encuentra sobre un lomo entre el Barranco de la Angostura y el Barranco del Tomadero, de interés etnográfico por sus casas-cueva bien conservadas, que aún en la actualidad son habitadas por sus vecinos. Desde la pintoresca plaza de San Ramón, donde se alza la pequeña Ermita del pueblo junto a un joven Drago (Dracaena draco), hay unas vistas espectaculares del Barranco del Tomadero donde, en una de sus vertientes, se halla el caserío de Los Batanes; a la derecha de dicha plaza empieza el recorrido donde hay un poste informativo con varias señales del PR y una que nos dirige hacia el Mirador de Agüaide, que opcionalmente tomaremos si queremos llegar a el después de un sencillo recorrido de unos seiscientos metros junto al Morro de Agüaide (633 m.) y sobre la zona agrícola de Los Llanos, para tener al final unas vistas espectaculares del Roque de Dos Hermanos (343 m.), de la Punta Fajana y de la costa agreste de esta parte del Macizo de Anaga en las inmediaciones de Punta del Hidalgo.

Sendero hacia el Mirador de Agüaide.

De regreso, comenzaremos en la trasera de la plaza, dirigiéndonos hacia un antiguo muro de piedra seca que delimita unas huertas; a la derecha hay un ancho camino que evitaremos y que va hacia una serie de casas-cueva en La Quebrada, que son la auténtica identidad de este atractivo lugar; de frente sigue nuestro recorrido en suave bajada empedrada entre Pencones (Opuntia maxima), Mato Riscos (Lavandula pinnata) y algunos Verodes (Senecio kleinia) a bordear unas parcelas de cultivo; un poco mas adelante el descenso se acentúa sobre Los Andenes con vistas espectaculares hacia el Roque de los Pinos (550 m.), un peñasco rocoso con la particularidad exclusiva de albergar el único reducto de Pino Canario (Pinus canariensis) dentro del Parque Rural de Anaga, así como una población escasa de un raro ejemplar endémico de Jaguarzo (Cistus chinamadensis).

 
Señalización en Chinamada.

Casas - Cueva de Chinamada.

Continuamos por el estrecho sendero, en ocasiones con empedrado y en otras con algunos escalones tallados en el firme, hasta que mas adelante llanea bajo el risco de tosca perteneciente al Morro de Agüaide (633 m.) donde crecen gran cantidad de Taginastes (Echium leucophaeum), Bejeques (Aeonium ciliatum), Verodes (Senecio kleinia), Tabaibas (Euphorbia mellifera), Mato Riscos (Lavandula pinnata) y algunos Chagorros (Sideritis dendrochahorra). Más adelante remonta en varias ocasiones y se convierte después en un ancho y corto tramo con firme horadado sobre la Hoya de Bravo donde hay un mirador natural protegido con una valla de madera que se asoma al Barranco del Tomadero, teniendo unas vistas espectaculares del Roque de los Pinos y de la ladera que se alza sobre dicho barranco y que se desplaza desde el Roque de la Barca hacia la costa terminando en el Roque de los Cardos (297 m.).


 
Balcón hacia el Roque de los Pinos
y el Barranco del Tomadero (d).

Bruscamente continúa el recorrido con pendiente mas acusada, pasando junto a otra valla de madera donde el firme sigue siendo bastante liso y topándonos enseguida de forma repentina con las extensas vistas del Roque de los Cabezos (466 m.), un curioso risco agujereado conocido como “El Juralillo” y del Roque de Dos Hermanos (343 m.), que se precipita hacia la Punta del Frontón, serpenteados ambos en sus bases por el sendero que debemos ir recorriendo.

 
El sendero bordea el Barranco del Tomadero.

Inmediatamente el sendero desciende bruscamente por firme rojizo, donde hay algunos escalones tallados en la tosca en algunos pasos muy empinados, que nos dejan en una amplia repisa rocosa en la Tablada de los Campitos, rodeada de infinidad de Tabaibas (Euphorbia mellifera) y Cardones (Euphorbia canariensis), sobre todo en las laderas que dan al barranco.


 
Roque de los Cabezos y Dos Hermanos (i).

Panorámica de Punta del Hidalgo.

Luego el camino se vuelve muy resbaladizo y hundido en el terreno y serpentea mas adelante por una zona rocosa hasta llegar a otra explanada circundada con troncos de madera con vistas hacia Punta del Hidalgo, donde destaca el faro de color blanco; inmediatamente bordeamos un barranquillo bajo el Mirador de Agüaide y nos dirigimos bajo los riscos y expuestos al barranco, hacia la Cueva de Treguero, un hueco amplio y bastante alto que penetra en el risco y se accede a través del mismo sendero por unos escalones labrados en el firme, bajo nuestros pies se encuentra la Hoya del Juraillo, unas resbaladeras repletas de Cardones (Euphorbia canariensis) y Tabaibas (Euphorbia mellifera) que se precipitan hacia el fondo del barranco; frente a nosotros la ladera contraria de dicho barranco es también digna de admirar, repleta de riscos rocosos, cascadas por donde desagua el terreno en temporada de lluvias y altas crestas que forman una preciosa cuerda montañosa.

 
Punta del Hidalgo desde un mirador (d).

 

Continuamos el recorrido dejando atrás la cueva y remontamos un buen trozo por firme bastante compacto y muy marcado, entre multitud de Pencones (Opuntia maxima) y un espectacular Cardonal – Tabaibal (Euphorbia canariensis y Euphorbia mellifera), acompañado de algunos Verodes (Senecio kleinia), Taginastes (Echium leucophaeum) y en menor medida, Tomateros Silvestres o Rejalgaderas (Solanum nava), sumamente rara de observar en plena naturaleza.

Cuevas de Treguero.

 

Sigue en descenso un largo tramo, siempre bajo los imponentes peñascos y andenes que se alzan sobre el sendero y más adelante nos encontraremos otra oquedad donde hay algunas piedras dispuestas a modo de asiento que nos invitan a hacer una parada para admirar el paisaje que nos rodea. Luego un descenso vertiginoso por firme rocoso y con numerosos escalones tallados, hace que extrememos un poco las precauciones ya que es muy empinado, terminando en un recorrido llano con vistas espectaculares hacia el Roque de Dos Hermanos (343 m.), que lo vemos cada vez mas cercano.

 
Bajada delicada (d).

Mas adelante zigzaguea por firme muy rojizo entre taludes rocosos, sobre la Hoya de la Palma y se dirige cómodamente hacia la amplia Degollada de los Almácigos, donde desciende suavemente bordeado de una valla protectora de madera hasta llegar bajo un espectacular pitón rocoso.

Llegando a la Degollada de los Almácigos.

 

Desde este precioso mirador natural se contempla una vista muy vertiginosa de la abrupta costa que está formada por algunas pequeñas calas de arena negra que son impracticables, y por un entrante rocoso que delimita la Playa de Ocadila, en la desembocadura del Barranco de la Caldera, escondidos tras el. Pasando de largo la Degollada de los Almácigos y habiéndonos parado obligatoriamente para disfrutar del paisaje, descendemos bruscamente por el camino zigzagueante de cara al Barranco del Tomadero, hacia otra degollada que sirve de base al Roque de Dos Hermanos (343 m.), que se sitúa bajo los Picachos de las Caletas (305 m.) y sobre el Andén Cumplido, unas resbaladeras que se precipitan hasta el mar; una vez lleguemos a dicho collado podemos asomarnos al acantilado y deleitarnos con las vistas agrestes del mismo y todo el esplendor del Océano Atlántico.

 

Degollada de los Almácigos.

Seguidamente, con el imponente Roque de Dos Hermanos (343 m.) a nuestra derecha, descendemos por la Hoya de los Almácigos, una loma cargada de Cardones (Euphorbia canariensis), donde también podremos ver algunas Vinagreras (Rumex lunaria), Cornicales (Periploca laevigata) y Verodes (Senecio kleinia), por un sendero que zigzaguea por grandes tramos rectos con firme arenoso y de color rojizo, que nos va acercando al cauce del Barranco del Tomadero; al llegar al borde de dicho barranco, un tramo de tosca muy erosionado y delimitado con piedras, da lugar a otro trecho mas llano que pasa junto a un dique rocoso en Piedra del Rayo, que igualmente se encuentra muy erosionado por el continuo paso, debido a su formación geológica de pequeñas lajas de piedra.

 
El sendero desciende por el Lomo de los Almácigos (i).

Barranco del Tomadero.

Continúa llaneando en un agradable paseo con vistas al núcleo poblacional de Punta del Hidalgo, por un camino estrecho, bordeando un pequeño barranquillo perpendicular al cauce del barranco principal; un poco mas adelante nos encontramos junto al sendero, una serie de cuevas de poca profundidad y menos altura con el suelo formado de tosca, que son ideales para un descanso y resguardarnos del calor e insolación cuando hagamos la ruta en verano.

 


Seguimos junto a un muro de piedra seca donde crecen algunas Tabaibas (Euphorbia mellifera), hacia una gran roca desprendida que bordea el recorrido después de salvar unos pocos escalones de piedra; la vista hacia atrás, mirando a la cabecera del Barranco del Tomadero, es impresionante, pudiéndose observar las dos aristas colindantes coronadas por infinidad de picos, incluso podemos ver parte del itinerario del camino que hemos recorrido.

 


Continuamos llaneando a poca distancia del fondo del barranco y por un sendero suficientemente ancho y algo sinuoso, con firme bastante compacto y cómodo de andar, hasta que un giro brusco a la izquierda nos hace descender por una zona rocosa que termina junto a la Ladera de la Fajana bordeado por un largo muro de piedra seca donde crecen grandes ejemplares de Piteras (Agave americana) y que delimita una antigua finca de cultivo, justo en la base del Roque de Dos Hermanos (343 m.).

 

Roque de Dos Hermanos.

Seguimos el camino junto a dicho muro y bajo la mole imponente del Roque de Dos Hermanos y sus laderas atestadas de Cardones (Euphorbia canariensis); bordeando el sendero crecen multitud de Uvillas de Mar (Zygophyllum fontanesii) y en unos pocos metros se desvía repentinamente hacia la izquierda para descender mediante unas escaleras de piedra, al cauce propiamente dicho del Barranco del Tomadero que en esta parte baja también se denomina Barranco del Río; desembocaremos, junto a un pozo de agua que se encuentra protegido por un enrejado de hierro, en un camino marcado en la cuenca del barranco, que lo cruza hacia otro pozo situado en la ladera contraria; este sendero tiene un desvío opcional, entre Lechuguillas de Mar (Astydamia latifolia) y algunos Pencones o Tuneras (Opuntia dillenii), hacia la Playa de los Troches, una amplia ribera de grandes piedras que se abre entre la Punta del Frontón, bajo el imponente Roque de Dos Hermanos y la Punta de la Laja.

 
Pozo en el cauce del barranco.

 
Playa de los Troches.

 
Final de la ruta.

De regreso, tomaremos dirección al segundo pozo, situado en una edificación junto a una mala pista de tierra que va ascendiendo hasta encontrarnos con un muro que deslinda una finca particular al lado del Barranco Seco y que después de atravesar una valla de hierro, nos dirige por asfalto en mal estado, hacia el final de la ruta en un mirador situado en la terminación de la carretera TF-13, donde podremos distinguir una bella imagen de todo el contorno costero y notablemente del Roque de Dos Hermanos (343 m.), protagonista de todo el paisaje.

Iglesia de S. Mateo en Punta del Hidalgo.

Desde este punto tendremos acceso al núcleo urbano de Punta del Hidalgo por la carretera principal, encontrándonos varias paradas de guaguas y en unos ochocientos metros la Iglesia de San Mateo, alrededor de la cual tendremos multitud de servicios como bares, restaurantes, tiendas, etc., dando por finalizado el recorrido señalado como PR-TF-10.


© Texto y fotografías de Francisco Fariña

 

1 comentario:

  1. Ne recomiendadas este sendero para niñas de 11 y 12 años
    Un saludo y gracias por compartir tu blog.

    ResponderEliminar