ICOD DE LOS VINOS - GENOVÉS - ICOD DE LOS VINOS
(Regreso por el Camino real del Norte)
FICHA TÉCNICA
TÉRMINO MUNICIPAL: Icod de los Vinos y Garachico.
COMO LLEGAR: En el punto kilométrico 5 de la carretera TF-42, se
encuentra el enlace para acceder al núcleo urbano de Icod de los Vinos.
COMIENZO: Iglesia y Plaza de San Marcos Evangelista.
FINAL: Mismo lugar.
DIFICULTAD: Baja.
DURACIÓN: Indeterminada.
LONGITUD: 9,8 km.
PROVISIÓN DE AGUA: El casco urbano de Icod de los vinos está provisto
de todos los servicios necesarios. Al término del Camino de La Coronela hay una
fuente pública y en Los Lavaderos de Las Canales hay agua, pero no es apta para
el consumo humano, solo para refrescarse.
LUGARES DE INTERÉS: 1.- Iglesia de San Marcos Evangelista; 2.- Casco
histórico; 3.- Parque
del Drago; 4.- Plaza Luis León Huerta; 5.- Plaza y Ermita de San Felipe
Neri; 6.- Calvario Virgen del Perpetuo Socorro; 7.- Ermita de la Consolación;
8.- Iglesia del Corazón de Jesús; 9.- Mirador de El Guincho; 10.- Camino Lance
Padilla; 11.- Camino
Real del Norte; 12.- Iglesia de Nuestra Señora de Las Mercedes; 13.-
Lavaderos de Las Canales; 14.- Edificio de El Matadero; 13.- Casa del Molino.
VENTAJAS: Es un recorrido de alto valor paisajístico.
INCONVENIENTES: El ascenso hacia Genovés tiene un gran desnivel de
subida, pero ese motivo no tiene por qué ser un inconveniente.
PELIGROSIDAD: Ninguna digna de mención.
TIPO DE RUTA: Senderismo.
PUEDES SEGUIR O DESCARGAR ESTA RUTA EN WIKILOC
CARTOGRAFÍA
DESCRIPCIÓN
Iniciamos la ruta en el núcleo urbano de Icod de los Vinos, conjunto
histórico catalogado Bien de Interés Cultural (BIC), concretamente en la Plaza
principal donde se encuentra la Iglesia de San Marcos
Evangelista, un templo de tres naves que empezó a construirse en el año
1501 y fundado como Parroquia en 1515, cuya advocación está a nombre de San
Marcos Evangelista, una imagen del Santo que apareció en las costas del
municipio a poco de terminar la conquista de la isla. En el siglo XVII se
edifica su torre campanario y queda configurada como se encuentra en la
actualidad; el interior alberga importantes obras de arte religioso como la
imagen del Cristo de la Expiración del siglo XVII y algunos cuadros al óleo
como el Cuadro de Ánimas y el de la Asunción de la Virgen; también alberga un
objeto artístico único como lo es una Cruz de Plata hecha en filigrana, tallada
en el siglo XVII y venida desde Cuba.
Iglesia de San Marcos Evangelista (izq.).
Plaza de La Pila.
Antes de empezar a caminar, podemos visitar el entorno de la plaza,
donde se encuentra el Parque del Drago, un recinto que alberga el llamado Drago
milenario, un ejemplar de Drago Canario (Dracaena draco) cuya longevidad
se calcula en unos 800 años; es un ejemplar único en su especie y está
catalogado desde 1917, como Monumento Natural. Otro hito por visitar es la
pintoresca Plaza de la Pila, a unos metros de la Iglesia de San Marcos
Evangelista, donde también se encuentra la Casa Museo de los Cáceres, un edificio
datado en 1802 de estilo neoclásico, con un portón espectacular como puerta de
entrada y unos ventanales de madera de tea, así como un balcón de la misma
madera. El interior consta de tres plantas dispuestas en torno a un patio
central, con una escalera que las comunica entre sí, también del mismo
material; actualmente el edificio se usa para actos culturales y expositivos.
Casa Museo de Los Cáceres (izq.).
Junto a la plaza también se encuentra la Casa Pérez Rijo, del siglo
XVIII y de estilo mudéjar, destacando un balcón de madera con celosía,
considerado como uno de los más antiguos del municipio; la Casa Oramas de Saa
se encuentra justo al lado, albergando otra balconada también espectacular,
pero sin celosía. Por todo el centro urbano, con la mayoría de las calles
peatonales, se puede pasear, observando y visitando casas señoriales de los
siglos XVI, XVII y XVIII, Ermitas e Iglesias que albergan un rico patrimonio e
incluso edificios históricos.
Casa Pérez Rijo y Casa Oramas de Saa (dcha.).
Parque del Drago.
Por la Calle San Sebastián, una de las más importantes y comerciales
del pueblo, andaremos hasta encontrarnos con la Plaza Luis León Huerta donde se
ubica la sede del Ayuntamiento, un edificio que ocupa el espacio del antiguo
Convento de San Sebastián, del siglo XVI, donde también se encuentra el
conjunto arquitectónico compuesto por el Convento e Iglesia de San Agustín;
éste último es uno de los más antiguos del municipio, edificado en el año 1585
en el solar donde había una pequeña Ermita y clausurado tiempo después, en
1821, junto a la clausura también al culto de la Iglesia de San Agustín, la
cual aún conserva en su interior dos retablos, uno de estilo barroco y otro
rococó y un artesonado mudéjar en una de sus capillas.
Iglesia de San Agustín (dcha.).
Edificio del Ayuntamiento (izq.).
Continuamos la marcha por la Calle Emeterio Gutiérrez Albelo, que
conecta más abajo con la Avenida Veinticinco de Abril, por la que iremos
progresando unos cien metros hasta encontrarnos con la Calle Ángel Guimerá; por
ésta andamos en suave descenso, pasando junto al edificio de la Policía local y
encontrándonos al final de la misma con el inicio de un camino tradicional con un
firme que mantiene su empedrado en perfectas condiciones y rodeado a ambos
lados por un murete de piedra seca, que desciende suavemente en dirección a la
carretera TF-42, cruzándola por un paso subterráneo y convirtiéndose luego en
una pista de tierra que desemboca en la Calle Cecilio Montes.
Camino tradicional empedrado.
En este cruce,
seguimos hacia la izquierda y enseguida nos encontramos con la Plaza de San
Felipe, donde se encuentra la Iglesia de San Felipe Neri, un templo
contemporáneo edificado en el siglo XX que alberga en su interior un precioso
altar labrado en madera, con las imágenes de San Felipe Neri y la Virgen de la
Salud. Anteriormente existía otra Ermita datada en el año 1651, la cual existe
todavía y prueba de ello es su espadaña en lo alto de la misma; vendida años
después y despojada de todos sus objetos de valor, cuya particularidad era que
tenía una tarima de madera en el exterior que aún se conserva, pudiendo ver
todo el conjunto en un costado de la plaza.
Tarima de madera de la antigua Ermita (dcha.).
Iglesia de San Felipe Neri.
Seguimos por la Calle Cecilio Montes, con unas vistas panorámicas
inmejorables donde se vislumbra parte de la llamada Isla Baja, donde destaca el
Roque de Garachico y la zona costera de El Guincho; más allá puede verse la
Montaña de Taco (276 m.) y parte del Macizo de Teno. Avanzamos por la zona de
Cuatro Caminos por el Camino La Suerte, una calle asfaltada que cruza en un
momento determinado el Paseo de Las Américas, que también con firme de asfalto,
se dirige a la Playa de San Marcos.
Camino de La Suerte.
Seguimos de frente, entre fincas de
plataneras y curiosamente en una de ellas asoman unos curiosos amontonamientos
de piedras, se trata de la llamada Pirámide de Cuatro Caminos, edificación
similar a las Pirámides de Güimar;
hay diferentes hipótesis sobre estos elementos de construcción, una es que
fueron levantadas para usos agrícolas y la otra, más misteriosa, que fueron
edificadas por los Guanches como calendarios solares o lugares de celebración
de rituales, ambas son aún un misterio por resolver.
Camino entre plataneras.
Pirámide de Cuatro Caminos (dcha.).
Una subida moderada nos deja en el cruce con el Camino de Las Barandas,
que también asfaltado, se dirige a la costa; seguimos de frente por la Calle
Cuatro Caminos, pasando por el exterior de unas pintorescas y coloridas
viviendas de arquitectura típica canaria y luego descendiendo suavemente
bordeando la Urbanización La Hurona.
Urbanización La Hurona (izq.); Calvario de la Virgen del Perpetuo Socorro (dcha.).
Unos metros después, en una curva cerrada que
hace la calle, nos encontramos con la entrada de la Finca Valois, donde hay un curioso
calvario con la imagen de la Virgen del Perpetuo Socorro; avanzamos luego junto
a los muros almenados de otra propiedad y llegamos al inicio del Camino de la
Coronela, que continúa de frente en forma de Carril Bici.
Inicio del Carril Bici.
Seguimos la marcha
llaneando entre fincas de plataneras, donde crecen algunos hermosos ejemplares
de Palmeras Canarias (Phoenix canariensis) y una casona canaria, la Casa
de las Cañas, que se ubica al borde del Barranco de Caforiño y luego, el paseo
va descendiendo muy suavemente, paralelo a la carretera TF-42, que queda a un
nivel superior; las vistas hacia nuestra derecha son espectaculares,
ofreciéndonos la situación de las instalaciones de la Finca Valois, rodeada de
un frondoso palmeral, que se ubica sobre una lomada rocosa que se eleva sobre
la plantación.
Finca Valois desde el Carril Bici (dcha.).
Más adelante, en una bifurcación, el Camino de la Coronela
continúa su curso hacia la derecha, nuestra ruta lo evita y progresa de frente
por el Carril Bici, que avanza, esta vez con panorámicas de la zona costera del
municipio, donde se distingue, entre las extensas plantaciones de plataneras,
las instalaciones de un hotel rural y al fondo, en el mar, la silueta
inconfundible del Roque de Garachico, declarado Monumento Natural.
Vistas panorámicas hacia la costa de Garachico.
El Carril Bici termina repentinamente en una parada de guaguas junto a
la carretera, nosotros buscaremos una escalera estrecha que desciende de nuevo
hacia el Camino de la Coronela, por el cual seguiremos andando pisando asfalto,
junto a algunas viviendas de corte antiguo y unos metros más adelante,
atravesando el Barranco del Malpaís, un cauce poco profundo que sirve de
delimitación de los municipios de Icod de los Vinos y Garachico y que desemboca
en la Punta de la Sabina.
Casas tradicionales en el Camino de La Coronela.
Después de haber dejado atrás un tramo de calle
bordeado por un muro de piedra seca y la entrada al hotel rural, donde puede
observarse la Ermita de La Consolación, del siglo XVI y ubicada en terreno
privado, confluiremos con la carretera general, donde nos encontraremos con un
mirador hacia la costa de El Guincho, desde donde se vislumbra la puerta
principal de la Ermita, rodeada de un pequeño caserío.
Mirador hacia la Ermita de La Consolación (dcha.).
Ermita de La Consolación, dentro de una propiedad privada.
Frente a este mirador
está la Calle Buganvilla, que nos llevará al camino que sube hacia el Caserío
de Genovés, pero antes de acometer el ascenso, seguimos de frente y a unos cien
metros nos desviamos a la derecha por la Calle Camino Viejo, que finaliza en la
Calle Flandes, justo donde se encuentra la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús,
un templo moderno, bendecido en el año 2001 a petición de los vecinos de la
zona, ya que la Ermita de la Consolación está en una propiedad privada no
teniendo acceso al público general.
Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús.
Seguimos de frente unos metros de ascenso moderado, hasta llegar al Mirador
de El Guincho, una infraestructura compuesta de una serie de pequeños senderos
alrededor de un entorno natural volcánico, donde crecen algunas especies
autóctonas, mayoritariamente Tabaibas (Euphorbia lamarckii y
Euphorbia balsamifera), Magarzas (Argyranthemum frutescens),
Pasteles de Risco (Aeonium tabuliforme) y Verodes (Kleinia neriifolia).
Está situado estratégicamente en una atalaya que ofrece unas inmejorables
panorámicas del municipio de Garachico con su inseparable Roque de Garachico,
pudiendo destacar también el nuevo puerto deportivo y la Montaña de Taco (276 m.),
mucho más alejada.
Mirador de El Guincho.
Después de la visita al mirador, desandamos el camino hasta
encontrarnos con la Calle Buganvilla, por la que tendremos que ascender con
fuerte pendiente hasta llegar a un depósito de agua, justo en el lugar donde se
termina la calle asfaltada. Por la izquierda hay unas escaleras de piedra con
una baranda de madera y un cartel indicativo con la leyenda “Genovés”, muestra
de que vamos por el camino correcto, aquí empieza el Camino
Lance Padilla; enseguida subimos por una pasarela de madera que tiene
acceso directo al camino, que continúa muy sinuoso y con fuerte ascenso,
bordeado por un muro de mampostería que delimita una propiedad privada.
Inicio del Camino Lance Padilla.
El
firme lo encontramos empedrado y en algunos tramos reforzado con escalones y
perfectamente delimitado; por el entorno crecen multitud de Vinagreras (Rumex
lunaria), Tabaibas (Euphorbia lamarckii), Bejeques (Aeonium
arboreum), Verodes (Kleinia neriifolia) y gran cantidad de
Trebolinas (Oxalis pes-caprae), jalonando nuestros pasos.
Camino Lance Padilla con firme empedrado.
Llegaremos a
una canalización que corta el sendero perpendicularmente, teniéndolo que cruzar
sin ninguna complicación y seguir por el sendero que se encuentra protegido por
un pasamanos de madera, Por las inmediaciones encontramos algunos ejemplares de
Alhelíes Montuños (Erysimum bicolor) y Cerrajones (Sonchus acaulis),
entre otras muchas especies autóctonas como Helecheras (Cystopteris fragilis),
que nacen frondosamente aprovechando la humedad del entorno.
Camino con vistas panorámicas.
Continuamos la
marcha, ahora por terreno más pedregoso, pasando junto a una construcción en
ruinas, que forma parte de un conjunto de huertas de cultivo; desde este punto
y a partir de ahora, nos acompañan unas panorámicas espectaculares del núcleo
poblacional de El Guincho y de la zona costera del municipio de Icod de los
Vinos, así como parte del de Garachico con su Roque en el mar.
El firme del
sendero está un poco más deteriorado, combinando zonas pedregosas con otras
cuyo empedrado ha sobrevivido a las inclemencias del tiempo; pasamos de largo
una bifurcación que, hacia nuestra izquierda, se dirige a las instalaciones de
la Galería de El Bucarón. Luego un tramo en línea recta que tiene el empedrado
en óptimas condiciones y un trazado más ancho, pasa junto a una puerta de
entrada ruinosa que sirvió en alguna ocasión para impedir la entrada a un
terreno particular, y después el camino continúa, siempre subiendo con fuerte
desnivel, en esta ocasión protegido por un pequeño murete de cemento que lo protege
del acantilado que se extiende por nuestra izquierda.
Llegando al Caserío de Genovés.
Más Adelante, circula con
un desnivel más moderado entre algunas huertas de cultivo y termina poco
después en una calle asfaltada, entre las primeras viviendas del núcleo
poblacional de Genovés; en pocos metros estaremos en la carretera TF-82, la
cual tendremos que cruzar para confluir enseguida con el Camino
Real del Norte a su paso por dicha población.
Avanzamos por el mismo hacia
la izquierda, por una calle asfaltada que discurre en suave descenso y paralela
a la carretera general, entre multitud de huertas de cultivo y viviendas
aisladas, algunas de ellas en estado ruinoso, bordeando el camino. Después de
unos setecientos metros, volvemos a cruzar la carretera general y conectamos
con un tramo de camino que mantiene su empedrado original y los muros de piedra
seca que lo delimitan, cruzando el cauce del Barranco Asero, donde crecen unos
enormes ejemplares de Tabaibas que aprovechan la humedad del entorno, para
poseer tal porte.
Camino Real del Norte.
Al terminar, conectamos con la Calle Camino de los Rosales,
que avanza por la zona de Las Canales, desembocando por tercera vez en la
carretera TF-82, justo donde se encuentra la Iglesia de
Nuestra Señora de Las Mercedes, en el centro de una amplia plaza, es de
estilo arquitectónico contemporáneo, consagrada en el año 1996.
Tramo empedrado cruzando el Barranco de Asero.
Al otro lado de la carretera empieza el Camino de los Lavaderos, que,
con firme pavimentado, desciende suavemente junto a Los Lavaderos de Las
Canales, una sucesión de piletas individuales escalonadas, en un óptimo estado
de conservación, ubicadas junto al camino. La ruta sigue su curso en descenso y
otra vez tendremos que cruzar la carretera general y confluir con el Camino Las
Tenerías, que avanza entre muros de piedra seca, donde crecen gran cantidad de
Cerrajones (Sonchus acaulis) y Bejeques (Aeonium arboreum),
pasando luego junto a unas viviendas de estilo arquitectónico de Canarias y un
Calvario que contiene tres cruces de madera.
Los Lavaderos de Las
Canales (izq.).
Edificio de El Matadero (dcha.).
Más adelante el trayecto continúa
paralelo a la carretera, tomando una estrecha senda empedrada, que pasa junto
al viejo edificio de El Matadero, desembocando enseguida en la Calle del
Barranco, que, mediante un túnel excavado en el risco, nos lleva a
introducirnos en el núcleo urbano de Icod de los Vinos. A la izquierda nos
encontramos con la llegada de otra variante del Camino
Real del Norte, que pasa por el Caserío de La Vega y por el Camino Boquín,
y en unos metros nos encontramos la entrada principal del Parque del Drago y luego
con La Casa del Molino, que alberga un molino de agua del siglo XIX de estilo
mudéjar.
La Casa del Molino (izq.).
Un callejón empedrado nos va llevando paulatinamente hacia el núcleo
urbano y nos hace desembocar en la Plaza de la Pila, lugar ideal para acometer
una visita al pintoresco casco histórico del municipio; es aquí donde acaba
nuestra ruta.
© Texto y fotografías de Francisco Fariña
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