viernes, 28 de enero de 2022

EL PORTILLO - MONTAÑA BLANCA - EL PORTILLO (Por el S-6 y regreso por el S-22)

EL PORTILLO - MONTAÑA BLANCA - 
EL PORTILLO
(Por el S-6 y regreso por el S-22)

FICHA TÉCNICA

TÉRMINO MUNICIPAL: Los Realejos y La Orotava.

COMO LLEGAR: En el punto kilométrico 32,2 de la carretera TF-21, que une la ciudad de La Orotava con la de Granadilla, se encuentra el parquin del Centro de Visitantes del Portillo, dentro del Parque Nacional del Teide. 
COMIENZO: Centro de Visitantes de El Portillo. 
FINAL: Mismo lugar. 
DIFICULTAD: Media. 
DURACIÓN: Indeterminada. 
LONGITUD: 13,8 km. 
PROVISIÓN DE AGUA: No.
LUGARES DE INTERÉS: 1.- Centro de Visitantes de El Portillo; 2.- Montaña de los Tomillos (2223 m.); 3.- Montaña de Los Corrales; 4.- Montaña Rajada (2506 m.); 5.- Montaña de los Conejos (2436 m.); 6.- Risco de los Burros; 7.- Lomo del Retamar; 8.- Llano de las Brujas; 9.- Llano de los Rastrojos; 10.- Cañada de Los Guancheros; 11.- Roque del Peral; 12.- Jardín Botánico. 
VENTAJAS: Recorrido dentro del Parque Nacional del Teide por senderos perfectamente definidos y señalizados. 
INCONVENIENTES: Es aconsejable consultar la previsión meteorológica ya que se trata de un recorrido por media montaña y el tiempo puede cambiar repentinamente y sin previo aviso. Hay que tener en cuenta que en verano la radiación solar es muy intensa y en invierno podemos encontrarnos con los senderos completamente nevados. El Centro de Visitantes y su parquin, suelen estar masificados.
PELIGROSIDAD: Ninguna. 
TIPO DE RUTA: Senderismo.
 
 
PUEDES SEGUIR ESTA RUTA EN WIKILOC


CARTOGRAFÍA


DESCRIPCIÓN

En el lugar conocido como El Portillo se encuentra uno de los dos Centros de Visitantes de los que dispone el Parque Nacional del Teide; ofrece una completa exposición sobre sus aspectos geológicos, botánicos, zoológicos y arqueológicos más importantes del parque, además de un jardín botánico donde se investiga y expone al público general que lo visita, la flora endémica que existe dentro del mismo. Desde este punto parten varias rutas muy educativas que se internan en el pinar anexo y en el entorno cercano, como la llamada Ruta del Pinar de la Cumbre y la Ruta del Retamar, entre otras.

 
 
 Paneles de información al inicio de la ruta.
 
Junto a la puerta principal del centro empieza la ruta S-1 (El Portillo – La Fortaleza) que, mediante una rampa empedrada, asciende bordeando un promontorio rocoso y desemboca poco después en la senda que se dirige hacia el jardín botánico, después de pasar por una puerta compuesta de una barra de seguridad que solo da paso en una dirección. Tenemos que ir hacia la izquierda, ya que por el lado contrario nos llevaría de nuevo al Centro de Visitantes y también al inicio de la Ruta del Pinar de la Cumbre, distante unos metros. Andamos por un sendero muy bien definido y llano que tiene un desvío más adelante para visitar un mirador donde hay un panel informativo que explica los diferentes estratos volcánicos que se han formado en el Teide (3715m.), cuya inconfundible silueta destaca de todo el paisaje. 
 
 
Luego tendemos que cruzar una puerta giratoria y descendemos bruscamente hacia una pequeña vaguada rodeada de riscos muy rocosos, donde se encuentra el Morro del Sordo (2082 m.), que resguardan un sendero muy sinuoso que más adelante remonta suavemente hasta llegar a un punto elevado donde hay un asiento de piedra ubicado intencionadamente para admirar el Teide (3715m.). Enseguida descendemos por el sendero que se nos presenta con un trazado muy pedregoso y erosionado, desembocando poco después en una zona llana donde el caminar se hace muy agradable; en pocos metros, después de haber atravesado un dique rocoso, veremos a nuestra izquierda el inicio del S-6 (El Portillo – Montaña de los Tomillos), como así lo indica una señal informativa y otras de dirección; de frente continúa su curso el S-1 (El Portillo – La Fortaleza), que emplearemos para el regreso, pasando por las inmediaciones del Roque del Peral (2104 m.), el cual vislumbramos desde este punto.
 
 
Inicio del S-6 hacia Montaña Blanca.
 
Tomamos el S-6 que es un sendero muy marcado en el terreno y que discurre entre la flora característica del parque y con vistas permanentes hacia El Teide (3715m.) y Montaña Blanca (2748 m.); en cuestión de unos doscientos metros se nos atraviesa perpendicularmente un nuevo recorrido, el S-24 cuyas señales indican la dirección a tomar para el Portillo Alto, a la izquierda y para La Fortaleza y El Cabezón, hacia la derecha, compartiendo paso con el PR-TF-41.1, que es una variante del PR-TF-41 (Ruta 0.4.0), sendero homologado y muy exigente que une la Playa del Socorro (0 m.) con la cima del Teide (3715 m.).
 
 Conexión con el S-24, hacia El Portillo Alto.

 Montaña Blanca y El Teide, siempre presentes.

Continuamos por el S-6 mediante un sendero muy bien definido y sinuoso, con un desnivel casi nulo, aunque tiene algunos remontes sin importancia, que se va abriendo paso entre grandes ejemplares de Retamas del Teide (Spartocytisus supranubius), Rosalillos de Cumbre (Pterocephalus lasiospermus), Hierba Pajonera (Descurainia bourgeauana), Alhelíes del Teide (Erysimum scoparium) y otras especies características del parque. Más adelante pasamos por la zona conocida como La Estancia de la Cera y después por las inmediaciones de La Plaza, un amplio llano que se extiende bajo las vertientes rocosas del Lomo Hurtado; avanzamos poco después bordeando las cercanías de las faldas de Montaña de los Tomillos (2223 m.), a nuestra izquierda se visualiza también la Montaña de los Corrales, un conjunto unificado de promontorios rocosos que sobrepasan los 2250 metros de altitud. 
 
 
 
Avanzamos llaneando entre un auténtico mar de Codesos de Cumbre (Adenocarpus viscosus) y de Retamas del Teide (Spartocytisus supranubius), que lucen en todo su esplendor en cuestión de tamaño, porque hay algunos ejemplares verdaderamente gigantescos; más adelante caminamos bordeando un talud rocoso que se extiende por nuestra derecha, por la zona conocida como Los Rastrojos. Luego el sendero remonta suavemente zigzagueando un tramo que termina en un promontorio rocoso donde podemos hacer una parada y mirar hacia detrás para disfrutar la vista de gran parte del trayecto que nos ha traído hasta este punto estratégico. 
 
 

Inicio del S-27 hacia Montaña Rajada.
 
Enseguida y de vuelta a la ruta, bajamos una suave pendiente unos metros hasta encontrarnos, en un pequeño valle, con el inicio del S-27 (Montaña Rajada) que empieza su recorrido por nuestra izquierda; para nuestra información hay varias señales que indican las direcciones del S-6, el cual vamos recorriendo, y el citado S-27, para el que hay un panel informativo que explica las características principales del recorrido, que discurre bordeando la base de Montaña Rajada (2506m.), pudiendo visualizarla desde nuestra ubicación, terminando unos dos kilómetros después en la pista de Montaña Blanca (2748 m.), por donde discurre el S-7 (Montaña Blanca – La Rambleta), el acceso directo para hacer cumbre en El Teide (3715 m.).
 
La Fortaleza y El Cabezón, al fondo.
 
 
Nuestro rumbo continúa de frente, evitando este último sendero que nos hemos cruzado, y lo haremos bordeando uno de los montículos de material volcánico que rodea el pequeño valle que vamos dejando detrás. Luego comienza un ascenso paulatino entre unas formaciones rocosas que jalonan el paso del evidente sendero de subida, que se encuentra marcado por una hilera de pequeñas rocas a ambos lados de su trazado; unos metros después cruzamos una pequeña vaguada que nace bajo la Montaña de los Conejos (2436 m.), un promontorio cubierto de rocas que se eleva por nuestra derecha. 
 
 
Cruce con el S-22 en dirección a Montaña Blanca.
 
Continuamos ascendiendo, serpenteando con un desnivel más acusado hasta llegar a converger con el S-22 (Lomo Hurtado), donde hay ubicado un poste con varias señales y que usaremos para el regreso; terminaremos el S-6, recorriendo unos sinuosos doscientos cincuenta metros, hasta desembocar en el S-7 (Montaña Blanca – La Rambleta), donde hacemos una parada para disfrutar de unas vistas inmejorables situados bajo las laderas de la imponente cara noreste del Teide. 
 
Vistas de La Fortaleza y El Cabezón desde el S-7.
 
Regresamos a la ruta desandando el sendero hasta la última señalización que nos hemos encontrado y desde ahí haremos caso de la señal indicadora del S-22, que comparte paso con el PR-TF-41 (Ruta 0.4.0); el sendero discurre bastante sinuoso por las laderas de Montaña de los Conejos (2436 m.) con vistas panorámicas hacia La Fortaleza y El Cabezón (2174 m.), ambas separadas por la Degollada del Cedro, donde se ubica la Cruz de Frejel, una pequeña capilla que se vislumbra desde este punto. 
 
Bomba volcánica junto al sendero (izq.).
 
Pasamos luego junto a unas bombas volcánicas de grandes dimensiones, que llaman poderosamente la atención, que están situadas justo al lado del sendero; luego continuamos descendiendo muy suavemente, hasta que en un momento determinado el camino toma una pendiente muy pronunciada y resbaladiza, que se abre paso con multitud de vueltas por una zona muy rocosa en las inmediaciones del Risco de los Burros. 
 
 
 
Después vuelve a su curso normal y prácticamente llano, avanzando casi en línea recta y sorteando gran cantidad de Retamas del Teide (Spartocytisus supranubius), Codesos de Cumbre (Adenocarpus viscosus), Rosalillos de Cumbre (Pterocephalus lasiospermus) y Hierba Pajonera (Descurainia bourgeauana); el recorrido está muy claro y está perfectamente marcado por lo que es imposible perder su trazado. Es interesante pararse de vez en cuando y darse la vuelta para poder identificar algunos de los corredores más emblemáticos del Teide, como por ejemplo el Corredor de Mario, bautizado en honor a los montañeros que lo subieron por primera vez en el año 1967, Mario Pérez Damas y el malogrado Cesáreo Tejedor, el Corredor de la Isla y no menos importante, el Corredor de Los Canariones, llamado así porque cuando nevaba en el Teide y venían los montañeros de Gran Canaria ávidos de escalar sus vertientes, ascendían por las primeras y más cercanas rampas de nieve que se encontraban; ambos fueron ascendidos por primera vez en los años 60, una época extraordinaria y gloriosa en lo que se refiere al montañismo en Tenerife. 
 

Retamas del Teide (Spartocytisus supranubius).
 

 
El camino progresa luego en dirección a una pared rocosa que se eleva por nuestra derecha, el Lomo del Retamar, descendiendo bruscamente junto a la misma y metiéndonos en una pequeña vaguada que la salvaremos enseguida mediante un trayecto más estrecho y sinuoso, que termina poco después en el Llano de las Brujas, el cual atravesaremos para encontrarnos más adelante el inicio de otro recorrido del Parque Nacional, el S-33 (Montaña Negra), forma parte de un camino antiguo procedente de La Guancha e Icod el Alto, que une este punto con el recorrido S-1 (El Portillo – La Fortaleza), bordeando antes, mediante un frondoso retamar, la Montaña Negra (2112 m.). Nuestra ruta es la S-22 y para ello haremos caso de la señalización que se encuentra en este punto, que indica también la dirección a seguir para el S-33, de la cual también hay un cartel informativo con las características del trayecto.
 
 
 Inicio del S-33 hacia Montaña Negra.


Al fondo, La Fortaleza.

Continuamos la marcha por un trazado completamente plano y con firme bastante arenoso, que serpentea por el Llano de los Rastrojos, una amplia llanada muy pedregosa atestada de Retamas del Teide (Spartocytisus supranubius), que se extiende por delante del final del Lomo de El Retamar. Luego, unos metros más adelante, siempre con la vista puesta en la impresionante muralla rocosa de La Fortaleza, bordearemos un vallado perteneciente a una zona acotada para la investigación de la flora del parque; después continúa zigzagueando con firme mucho más pedregoso y hacia un murallón rocoso perteneciente al Lomo Hurtado.
 
  Zona vallada para investigación de la flora endémica.
 
  Al fondo, El Cabezón y la Degollada del cedro.

 
Al llegar al pie de esta pared de roca, ascenderemos por un tortuoso y descompuesto sendero que remonta entre Retamas del Teide (Spartocytisus supranubius) y Rosalillos de Cumbre (Pterocephalus lasiospermus), que termina poco después en la zona denominada El Trancadero, por donde avanzaremos mediante una estrecha, sinuosa y marcada vereda que llanea mayoritariamente entre Rosalillos de Cumbre (Pterocephalus lasiospermus), con vistas cada vez más amplias de la Degollada del Cedro donde se encuentra la Cuz de Frejel y si echamos la vista hacia atrás, veremos el Teide (3715 m.) en toda su extensión, su inseparable Montaña Blanca (2748 m.) y más al norte, Pico Cabras (2360 m.).
 
Sendero por El Trancadero.

 

La Fortaleza (izq.) y El Teide (dcha.).
 
El sendero nos lleva luego a caminar entre grandes rocas que lo bordean, llegando en un momento determinado, a converger con el S-1 (El Portillo – La Fortaleza) que se cruza perpendicularmente a nuestra llegada; de frente también se inicia el S-25 (Recibo Quemado), fracción de un viejo camino que se usaba partiendo desde el Valle de la Orotava para visitar los pastos de alta montaña, de todo ello hay en este punto de encuentro, información en forma de señales de dirección. 
 
Cruce con el S-1 y el S-25.
 
Desde aquí también podemos disfrutar del paisaje que nos ofrece la vista de La Fortaleza con otra perspectiva diferente, al igual que la de la Punta del Cabezón, donde convergen los riscos y laderas de la Montaña del Cabezón (2174 m.), que guardan en su base la Cañada de los Guancheros, una planicie sedimentaria donde nacen y crecen a sus anchas especies vegetales características del parque como la Retama del Teide (Spartocytisus supranubius) y los Codesos de Cumbre (Adenocarpus viscosus), así como los Rosalillos de Cumbre (Pterocephalus lasiospermus), la Hierba Pajonera (Descurainia bourgeauana) y la Tonática (Nepeta teydea). 
 

 
El Teide, el Roque del Peral y El Cabezón.
 
Aquí terminamos de recorrer el S-22 y continuamos caminando hacia la derecha por el S-1 en dirección a El Portillo; el sendero es muy evidente y prácticamente iremos llaneando y con firme muy compacto, bordeando las inmediaciones de la masa boscosa, en la zona de la Hoya del Cabezón, perteneciente al Parque Natural de la Corona Forestal, que rodea toda la isla y que nos queda en esta ocasión, por nuestra izquierda. Más adelante cruzaremos los llamados Llanos del Roque del Peral y después de una bajada algo pedregosa por las inmediaciones del Lomo Hurtado, pasaremos junto al Roque del Peral (2104 m.), un pitón rocoso, que junto a otros que se elevan en sus inmediaciones, nos llamarán la atención por su valor paisajístico con el Teide (3715 m.) de fondo. 
 
 
 Roque del Peral.
 
Inicio del S-24 hacia el Portillo Alto (dcha.).
 
Seguimos la ruta y unos metros después de cruzar una pequeña vaguada, nos encontraremos con el inicio del S-24 (Portillo Alto), que evitaremos y que conecta este punto de nuestra ruta con el Caserío de Las Cañadas o Portillo Alto, situado junto a la carretera TF-21. Unos doscientos cincuenta metros después, estaremos de nuevo en el cruce con el S-6 (El Portillo – Montaña de los Tomillos), el sendero que nos llevó al principio hasta Montaña Blanca; sólo nos quedará desandar el camino por las inmediaciones del Morro del Sordo (2082 m.) que, llaneando y con algún remonte corto y suave, nos llevará de nuevo al Centro de Visitantes.
 

 
 Inicio de la ruta "Pinar de la Cumbre" (dcha.).
 
Opcionalmente podremos visitar el amplio Jardín Botánico mediante sus diversas rutas o realizar la ruta llamada Pinar de la Cumbre, que se adentra mediante un pequeño trayecto, por el pinar de la corona forestal. Daremos por finalizada la ruta en este emblemático lugar del Parque Nacional del Teide.



© Texto y fotografías de Francisco Fariña